El mundo del café está en constante evolución, y uno de los cambios más notables de los últimos años ha sido la popularidad del cold brew.
El cold brew es una forma de preparar café en donde se utiliza café molido, infusionándolo en agua fría durante un periodo prolongado de tiempo, normalmente de 8 a 24 horas.
Pero, más allá de ser una tendencia refrescante, este método de preparación tiene beneficios reales para tu cuerpo y mente. En este blog te contamos por qué cada vez más personas eligen el cold brew como su café de todos los días.
1. Menos acidez, más suavidad
El cold brew se prepara infusionando café molido en agua fría por 8 a 24 horas. Este proceso extrae menos ácidos que el café caliente, lo que da como resultado una bebida más suave, menos amarga y más amigable con el sistema digestivo. Para quienes sufren de acidez o estómago sensible, el cold brew es una gran alternativa.
2. Amigable con tu estómago.
El contenido bajo en acidez del cold brew puede ayudar a reducir los síntomas de reflujo gástrico o malestar intestinal. Si te encanta el café pero a veces te cae pesado, esta podría ser la forma ideal de seguir disfrutándolo sin efectos secundarios.
3. Energía sostenida (sin crash)
Aunque el cold brew suele prepararse con más café molido que el café tradicional, su dilución lo equilibra. Aún así, ofrece una dosis de cafeína estable, que proporciona energía prolongada sin el "subidón y bajón" que a veces sentimos con el café caliente.
4. Beneficios cognitivos y mentales
Estudios han demostrado que el consumo regular de café está relacionado con una mayor atención, mejor concentración y menor riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson. El cold brew, al contener los mismos compuestos activos, también aporta estos beneficios.
Entonces, ¿es el cold brew mejor que el café caliente?
No se trata de reemplazar uno por otro, sino de elegir el que mejor se adapte a tu estilo de vida. Si buscas una opción más suave, funcional y refrescante, el cold brew puede ser la mejor elección. Especialmente si tu cuerpo necesita menos acidez y tu mente exige energía sostenida para rendir al máximo.
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